domingo, 22 de marzo de 2009

Turismo Vivencial: Comunidades indígenas se convierten en empresarios

El turismo vivencial se perfila poco a poco en el mercado como un segmento de interés para generar focos de desarrollo en el Perú, dado que contamos con los requisitos básicos: una rica historia, cultura viva y naturaleza diversa. Una ventaja importante es que un servicio así permitiría que comunidades indígenas ingresen a cadenas económica, pues ellas se convierten en los ofertantes de este servicio. Y conforme progresen las visitas, se van generando negocios de otros tipos: hoteles, restaurantes, entretenimiento, deportes, y todo aquello que pueda motivar al turista vivencial.

Vilcashuamán, Ayacucho
En la práctica aún falta trabajar en la capacitación de las comunidades indígenas (desde temas de revalorar prácticas tradicionales hasta concebir un servicio al cliente como principal característica del servicio). Además, por lo general, las comunidades son vistas como "parte de la foto" y no se les da ese papel vital que cuentan en el servicio. Ante esto, jóvenes emprendedores de las principales ciudades deberían considerar trabajar por un buen tiempo en esas zonas rurales en la generación de la oferta turística vivencia, y así poder aplicar esos conociemientos académicos, además que serían un vehículo de integración y reconocimiento de nuestra diversidad.